Cuatro sherpas liderados por Tashi Lakpa partieron este lunes para intentar el récord de Everest invernal en solo 5 días. Lo harán junto al team del vasco Alex Txikón, que hace un mes está en la montaña. El alemán Kobusch va en solitario por la arista Oeste. Tashi brindó a Cumbres los pormenores del desafío.
El equipo Breathless Winter Everest, ligado a la empresa Seven Summit Treks, liderado por Tashi Lakpa e integrado además por Pasang Nurbu Sherpa, Ming Temba Sherpa y Halung Dorchi Sherpa, intentarán esta semana un veloz Everest invernal.
Los 4 realizaron ayer una conferencia de prensa en Kahtmandú con el sorpresivo anuncio: Este lunes arribarían al campo base de Everest para intentar su cumbre en invierno en sólo 5 días.
“Aún no se ha realizado una expedición de escalada en invierno y, por lo tanto, estamos intentando un nuevo récord”, dijo a la prensa el líder del equipo, Tashi Lakpa Sherpa, con 8 Everest en su haber y la marca del más joven a los 19 años de hacerlo sin O2 suplementario.
Tashi, de 34 años, tampoco usará oxígeno suplementario esta vez. Solo un montañista, también nepalí, había ascendido previamente a la cima en invierno en esa condición, en diciembre de 1987.
En Aconcagua
“Conozco la montaña. Estamos completamente preparados y nos hemos aclimatado. La mayor preparación para minimizar el riesgo en la montaña es la aclimatación”, agregó en la conferencia de prensa.
En tal sentido, Tashi Lakpa hizo cumbre en Aconcagua (6.962 m, Argentina) el 17 de febrero pasado, junto a clientes de su empresa y Ming Temba Sherpa como asistente. Por ello, ambos se encuentran perfectamente aclimatados a la altura.
Antes, el 4 de enero, Lakpa también coronó la cumbre más alta de América, esa vez junto a Halung Dorchi Sherpa, otro de los miembros del Breathless Winter Everest, según el mismo nepalí confirmó a Cumbres en un diálogo mantenido telefónicamente esta mañana.
Novedades en los equipos
Los nepalíes se unirán al equipo del alpinista español Alex Txikon en el campamento base del Everest, que espera las condiciones climáticas adecuadas.
El team del vasco sufrió cuantiosas bajas en el staff: Jonatan García se retiró luego de accidentarse mientras instalaban escalas en la cascada Khumbu.
Además desistieron el también español Oscar Cardo (mal de altura, debió ser evacuado en helicóptero) y Mingma Sherpa (Ice Doctor), la semana pasada. Para colmo, otros dos nepalíes del equipo no se encuentran en condiciones físicas para acometer la cima.
Por su parte, el alemán Jost Kobusch intenta su Everest invernal en solitario y sin O2 por la arista Oeste. Intento que por cierto le está costando mucho más de lo esperable. Ayer recién pudo superar el famoso Hombro Oeste de esa vía, ligeramente modificada en su periplo personal. Así, logró llegar a los 7.300 metros y regresar al CB para el intento final.
Everest invernal, alto y frío
Las temperaturas en inmediaciones de la cumbre del Everest en invierno regularmente caen por debajo de -40 grados. Los fuertes vientos exacerban aún más el riesgo de su ascenso. En esas condiciones, la piel expuesta se congela en menos de cinco minutos.
Cientos de escaladores acuden al Everest cada año, pero la mayoría intenta el ascenso durante alguna estrecha ventana de clima tranquilo que pueda producirse en primavera, entre abril y mayo.
En 2019, la temporada fue literalmente obstruida por un tráfico récord de 885 personas en la cumbre del Everest. 644 por el Sur y 241 por el Norte, en Tíbet.
El período de ascensos culminó con la muerte de 11 personas, al menos 4 atribuibles al hacinamiento a semejantes alturas.
El equipo de Tashi Lakpa viene promoviendo fuertemente el turismo de montaña en Nepal en cada expedición que acomete. Lo hizo recientemente en Aconcagua y volverá a hacerlo ahora en Everest invernal con el sorprendente desafío.
En Everest, los polacos Krzysztof Wielicki y Leszek Cichy fueron los primeros en alcanzar su cumbre en invierno, en 1980.
Después de ellos, es exigua la cantidad de intentos exitosos en la estación fría. El último logro data de hace 27 años, en 1993.
Alex Txikon entrevistado por Dani Álvarez, programa Boulevard, radio Euskadi, el 24 de febrero.