
En el vasto lienzo de la Tierra, la aventurera australiana Lucy Barnard traza un recorrido sin precedentes. Su odisea es una caminata monumental de 30,000 kilómetros, desde el punto más austral de Argentina, hasta la cúspide de Alaska, Estados Unidos, con el objetivo de convertirse en la primera mujer en atravesar la latitud completa del continente americano.
Desde el inicio en febrero de 2017 en Ushuaia, Argentina (54°48′26″S 68°18′16″O, Lucy ha cruzado fronteras y desafiado límites, atravesando Chile, Perú, Ecuador, Colombia, Panamá, Costa Rica, Nicaragua, Honduras y Guatemala. Actualmente, se encuentra en México. Por delante le quedan las enormes extensiones de Norteamérica, en busca del gran objetivo: Utqiagvik, más allá del círculo polar ártico en Alaska, el punto Barrow, el más septentrional de América (71°17′26″N 156°47′19″O).
Lucy Barnard, ya la primera mujer en cruzar Sudamérica a pie, celebró su logro al alcanzar el punto medio en Guatemala. Una breve pausa en su desafío de 30 kilómetros diarios le permitió escalar los volcanes Acatenango y Fuego, marcando así su hito.
La compañía constante de Lucy en esta travesía es Wombat, un fiel amigo de cuatro patas, adoptado en Chile. Juntos, enfrentan desafíos, superan límites y exploran lugares impresionantes, como el Camino del Inca en Perú, que Lucy describe como una conexión tangible con la historia.
La expedición no ha sido fácil. En la Patagonia, Lucy dudó de continuar debido a adversidades climáticas y desafíos incesantes. Sin embargo, el apoyo de seguidores en redes sociales le dio fuerzas renovadas para persistir.
Resiliencia
Lucy Barnard financia su épica caminata principalmente con ahorros. Pero también cuenta con el respaldo de patrocinadores, escribe para algunos medios y realiza campañas en redes sociales. La conexión virtual con un veterinario para Wombat y controles médicos frecuentes reflejan la dedicación de Lucy al bienestar de ambos.
La resiliente Lucy, que desafía cánones sociales y financieros, no busca solo batir récords. Su viaje se ha convertido en una inspiración para miles, demostrando que perseguir las pasiones personales, puede conducir a la felicidad.
Lucy anhela regresar a su vida “ordinaria” en Australia después de completar su travesía, pero su legado perdurará. Su audacia y determinación desafían la norma y abren huella para las mujeres en aventuras de resistencia.
Su historia, un testimonio del poder de la resiliencia y la búsqueda de los sueños, continuará inspirando a generaciones futuras.