El Gobierno de Andorra y los centros de ski privados costearán la mitad del valor de un vuelo especial que repatriará a 400 argentinos que trabajan en alguna estación del pequeño país europeo. La temporada de ski tuvo abrupto final en marzo, debido a la pandemia.
El Gobierno del Principado de Andorra ha ofrecido costear la mitad del boleto de avión de regreso a Buenos Aires para cientos de trabajadores argentinos que se desempeñan en temporada en los centros de ski del pequeño país europeo, y que se encuentran varados por la cuarentena y el cese laboral a raíz de la pandemia mundial de COVID-19.
Se calcula que son más de un millar los argentinos que en temporada invernal residen en Andorra y trabajan en alguno de los centros de ski, principalmente en los valles de Grandvalira y Vallnord. Monitores, instructores, pisteros, pero también personal de maestranza, mozos de restaurantes, empleados de hoteles y rentals, los argentinos son notoria mayoría entre los trabajadores extranjeros que hacen temporada. También hay bastantes provenientes de Chile.
A raíz de la pandemia de coronavirus que azota al planeta entero, la temporada esquiable en el hemisferio Norte concluyó precipitadamente este marzo. Con esa medida, los trabajadores de los centros de ski quedaron “a la deriva” en el Principado, sin trabajo y sin vuelos para regresar a Argentina.
Desde Toulouse
En una gestión conjunta entre el Gobierno Nacional y la asociación Ski Andorra (que congrega a todas las estaciones de ski andorranas), está previsto para este domingo 5 de abril el traslado de 400 argentinos vía terrestre hasta el aeropuerto de la ciudad francesa de Toulouse. Desde allí partiría (el consulado argentino aún no ha confirmado la certeza del vuelo) un avión con destino a Buenos Aires previa escala en París.
El costo del vuelo es de 600 euros. Ski Andorra asumirá la mitad de ese valor, 300 euros, y cada pasajero el resto. El Gobierno de Andorra se hace cargo del traslado terrestre hasta el aeropuerto.
En principio la loable iniciativa trae solución a aquellos “temporeros” argentinos sin pasaje de regreso. Otros en igual situación pero con billete de vuelta a Buenos Aires, debieron gestionar nuevas fechas. Esto en virtud del parate aéreo sobre todo en Argentina.
Asistidos y contenidos
CUMBRES confirmó telefónicamente la información con Luciano Martín, instructor de ski mendocino que cada temporada del invierno boreal trabaja en una estación de Vallnord, Andorra. “Lucho” comparte aventura y profesión con su esposa Carolina Bidart, también de Mendoza. Trabaja en Las Leñas y forma parte del nuevo proyecto El Azufre, en Malargüe.
Luciano y Carolina no abordarán el vuelo de Toluose. Ellos ya tenían ticket aéreo de regreso y lograron que se les modifique la fecha de regreso para el mes de mayo.
Ya sea en Andorra o en Argentina, ambos deberán someterse a similar aislamiento en cuarentena. Dado que son varias las temporadas consecutivas que llevan en Andorra, obtuvieron una especial atención de quien les arrienda el departamento donde residen por lo que queda de la temporada, para que puedan permanecer allí a un menor costo que el acostumbrado.
Lucho comentó que tanto él como los argentinos en la zona dejaron de trabajar a mediados de marzo. Fue entonces cuando la pandemia se generalizó. Agregó que en todo momento fueron asistidos, contenidos y acompañados por las empresas donde cada uno trabaja.
El Principado de Andorra, situado en la cordillera de los Pirineos, entre España y Francia, recibe cada año 9 millones de visitantes. Dispone de 300 alojamientos turísticos con 43.000 camas. Entre Grandvalira, Ordino-Arcalís y Vallnord Pal- Arinsal, ostentan más de 300 kilómetros de pistas en un total de 3000 hectáreas.