Una expedición de Ushuaia buscará llegar a la cumbre del monte Shipton, el más alto de la isla de Tierra del Fuego. Está en el sector chileno y es la cima mayor de la remota y misteriosa cordillera Darwin, en el extremo austral de los Andes.

El monte Shipton se encuentra en la Cordillera Darwin, en el sector chileno de la isla de Tierra del Fuego, en los confines de la Patagonia austral. Un lugar que, aún hoy, puede ser considerado la “terra incognita”.
El cordón montañoso tiene una extensión de 150 kilómetros y se despliega en sentido Este-Oeste surcado por fiordos y ensenadas e inmensos glaciares que bajan literalmente al mar.
Sus cumbres, abruptas y filosas, permanecen casi todo el año inmersas entre densas nubes y azotadas por feroces vientos y tormentas.
“Para una posible evacuación estás a unos 15 días de la vida humana más cercana” grafica lo remoto y aislado del lugar Sebastián Beltrame, guía de montaña y de esquí de la ciudad de Ushuaia, uno de los poquísimos intrépidos que cada tanto surca esa inhóspita y solitaria región.
Sebastián, junto a Bruno Pavone, Carloncho Guerra, Pedro Lima, Sofía Seghetti, Joaquín Díaz Suárez y Guido Riviere, conformarán una expedición cuyo objetivo es, el año próximo, la montaña más alta de la cordillera Darwin. Es el monte Shipton, de 2.568 metros, llamado así en honor al primer y en principio único montañista que la ascendió, en 1962. Eric Shipton lo hizo por la vertiente Sur, desde el canal Beagle.

El team argentino se apresta para ascender el enigmático Shipton por la estética y virgen cara Norte. Será a fin del invierno de 2021, y de lograrlo se convertirán, hasta donde se tiene conocimiento, en los segundos en llegar a esa magnífica cumbre, y los primeros por la vía elegida.
Los datos
En torno al Shipton persistió durante un tiempo una controversia acerca de su altura y otra por su nombre.
La altura aceptada en la actualidad es 2.568 metros, establecida en un mapa de autoría del proyecto UNCHARTED. Pero en algunas publicaciones de años atrás figura hasta con 100 metros menos.
“Si bien ha sido cartografiado por el IGM del Gobierno de Chile, antes de eso había diferentes cotas y alturas en distintas cartas y mapas” explica Sebastián en diálogo con CUMBRES.
En relación con la toponimia, lo cierto es que fue el propio Shipton quien bautizó como Darwin al monte subido por él por vez primera. Pero resultó que una cumbre vecina y apenas menor ya algunos la conocían con el nombre del célebre científico británico.
Así, alguien propuso entonces que el monte más alto de la cordillera pasara a llamarse Shipton. Por eso la confusión y porque son las dos más grandes montañas de la región y están muy cerca. “Parado en el fiordo Parry -añade Beltrame- las ves a las dos, una a cada lado unidas por un cordón con hongos de nieve por la humedad. Son como pequeños Torre (1)”.
Después de Shipton, es posible que nadie haya hecho cumbre nuevamente en esa montaña. Pasaron varias expediciones por las inmediaciones, entre ellas una travesía de la Armada francesa que cruzó de Oeste a Este por el campo de hielo. Hubo algunos intentos aislados y no mucha información disponible. “Cualquier escalador que pasa por abajo querrá subirla, porque es una montaña hermosa. Nos llama mucho la atención por estar ahí sin ser subida por más de 30 años”.

El plan
La idea del grupo es encarar la pared Norte abordándola por el fiordo Parry y por el medio mismo de la montaña.
El periplo comenzará en Ushuaia en vehículo hacia el Norte, recorriendo casi 300 km por territorio argentino para cruzar a Chile por el paso Radman, en el final de la ruta complementaria B.
Luego deberán “desandar” 200 km hacia el Sur, casi paralelos al límite internacional, hasta llegar al Seno del Almirantazgo. Calculan 6 horas.
Luego la expedición continúa embarcada en una gran lancha con casco de acero para 12 personas, aporte de la empresa chilena Canal. El traslado de los ascensionistas hasta la base misma del glaciar que desagota en la costa Norte del fiordo Parry, demandará unas 4 horas de navegación.

“Si el clima y el hielo acompañan (bloques de hielo en el mar dificultan la navegación) llegaremos al glaciar grande en la cara Norte del Shipton, y ahí veríamos cómo acceder al campo de hielo. Es una de las partes más complicadas y técnicas, hay una cascada de seracs bastante grande donde rompe el glaciar. Habrá que ver de qué forma sortearlo”.
El Campamento Base está previsto en un lugar plano dentro del campo de hielo, a 550 metros aproximadamente. El campo 2, o de altura, pretenden establecerlo a unos 1.200 metros. Desde allí atacarían la cumbre en una sola jornada, partiendo de madrugada para superar las partes técnicas ya con la luz del día. “Es un desnivel bastante parecido a la Pared Sur del Aconcagua. Y 100% nieve y hielo. Unos 1.500 metros de ruta” esquematiza Sebastián.
Los detalles
La expedición al Shipton tendrá lugar a fin de invierno, comienzo de primavera, del año próximo. Esto, para la región, aporta varias ventajas y evita inconvenientes: Las grietas en el campo de hielo estarán aún tapadas. En esta época la climatología es más estable (el 90% del año hay nubes en la zona). Accederán en esquíes lo máximo posible, pues esperan encontrar bastante nieve. Y los días ya son más largos, con luz solar entre las 6 AM y las 9 PM, aproximadamente.
En verano, en cambio, por la latitud, las horas de luz son muchas, por lo que el riesgo de caída de hielo es mayor, así como la presencia de grietas descubiertas y menos puentes de hielo. También el viento se incremente mucho en verano.
La inexplorada cara Norte del Shipton desvela a los expedicionarios. “La línea que se ve en mapas y fotografías llama la atención por lo bella. Es como una gran espina que surca la pared. Si mirás la montaña con ojos de escalador y montañista, te dan ganas de subir. La elegimos por la belleza”.
No obstante, si la cuestión climatológica se complica, existe la opción de intentar más hacia el Oeste, donde hay algunas canaletas y algo de mixto.
“Vamos con el estilo más limpio posible, sin fijar cuerdas, directamente con todo en la mochila, subir a la cumbre y bajar sin dejar nada. Es nuestra filosofía de cómo vemos la montaña”. Además, en estas latitudes es costumbre moverse muy rápido en la montaña, debido a la inestabilidad en la climatología. “Si no te movés rápido, hay peligro. Lo más liviano posible y en el menor tiempo. Esto exige que estés mucho mejor preparado física y mentalmente y que la logística salga lo mejor posible. Cuanto más aceitado, más probabilidad de cumbre”.

Terra incognita
Para el proyecto Shipton, el grupo está organizado por incumbencias: unos alpinistas intentarán la cumbre, otros oficiarán de soporte logístico y asistencial, y otros serán los encargados de documentar la expedición en video.
Sobre todo la idea de grabar y fotografiar profesionalmente el desafío tiene su raíz en la ausencia casi total de información o documentación sobre el Shipton particularmente y sobre toda la magnífica y remota cordillera Darwin.
Del equipo, el único que ha incursionado en la región es Sebastián, con varias expediciones en Darwin, isla Gordon, etc. El año pasado, inclusive, logró hacer con dos clientes una cumbre virgen cerca del Shipton. “Conozco bastante la zona por donde vamos a andar. Pero siempre es sorprendente porque es un lugar increíble, son los Alpes a solo 60 km de Ushuaia. Es una locura tener en el lugar donde vivimos una cordillera totalmente inexplorada. Es muy llamativo”.

(1) Sebastián Beltrame hace referencia al cerro Torre (3.133 m), la magnífica columna de granito situada en el límite de Argentina y Chile, en el Campo de Hielo Patagónico Sur, cerca de El Chaltén. El Torre y sus agujas, según los más grandes montañistas de todos los tiempos, es uno de los desafíos alpinísticos más complejos del planeta.